El juicio finalizó hoy en la Cámara Oral de Rio Gallegos. El condenado es el ex cuñado de la mamá de la pequeña que ahora tiene siete años. Al momento del hecho, sucedido en Rio Turbio, la víctima tenía 3 años.
Según se informó, el sujeto estuvo libre hasta el mediodía de hoy, cuando finalizó el juicio.
Estuvo cuatro años libre, a la espera del juicio que finalizó hoy con sentencia de sólo seis años.
Contra todo lo que la sociedad solicitaba, el fallo de la fiscalía fue sólo seis años de condena para el culpable.
En la previa del juicio, la mamá de la víctima había expresado a Nuevo Día: «Creo que esto se adelantó porque hubieron muchas denuncias hacia otras personas de su familia por abuso a menores de niños de 10 años».
«Eso no es justicia»
El hombre fue denunciado en mayo del 2018 y, desde entonces, permanecía en libertad. En diálogo con Radio Nuevo Día 100.9, la madre de la víctima había declarado: «Yo pido de corazón a la jueza que hagan justicia y que no lo dejen suelto porque lo va a volver a hacer».
El hecho denunciado tuvo lugar en mayo de 2018. y la causa fue caratulada como «abuso sexual con acceso carnal agravado».
Karen, madre de la menor, expresó su intranquilidad ante el funcionamiento de la Justicia de Santa Cruz que le otorgó insólitos beneficios al acusado pese a que la cámara Gessel realizada a la pequeña dio positivo al abuso sexual.
Tras la denuncia del hecho en 2018, el hombre se fugó de la cuenca carbonífera y fue capturado luego de tres meses. Al cabo de un tiempo, la madre de la menor recibió una orden de restricción por parte del acusado, informa el diario Nuevo Dia.
«Me llega una notificación que me tenía que presentar a la comisaria. Cuando voy me pusieron una perimetral y lo dejaron en libertad porque el juez de Río Gallegos decía que «él no era un peligro para la sociedad». Yo reaccione mal, como toda mamá, no entendía cómo me podían poner la perimetral a mí y cómo podían dejar suelta a la persona que abusó de mi hija», manifestó.
Dicho proceder fue sucedido por una serie de acontecimientos que acrecentaron aún más la indignación de esta madre.
«Dos días después, yo voy a un supermercado con mi hermana y media cuadra antes de llegar a la casa de mi abuela, donde mi hija estaba jugando afuera, estaba él (por el acusado) trabajando de albañil. Me dijeron que iba a ir presa si no me iba del lugar», declaró.
Posteriormente Karen tomó conocimiento de que el hombre había sido trasladado a la localidad de Formosa y cuando pidió explicaciones al respecto, le indicaron que «se fue para que esté más cerca de su familia y para resguardar su integridad».
«Pasa esto, no supe más nada del caso hasta hace dos semanas. Creo que esto se adelantó porque hubieron muchas denuncias hacia otras personas de su familia por abuso a menores de niños de 10 años», añadió.
Juicio
Hace dos semanas la madre de la niña recibió la notificación del juicio. No obstante, las actuaciones por parte del fiscal y su defensor ocasionaron que su anhelo de justicia se vea ensombrecido.
«Me tocó verlo de nuevo después de lo que hizo y el defensor de mi hija no sabía por cuanto iba a pelear. El fiscal pidió seis años de prisión para una persona que abusó de una niña de 3 años y el abogado del imputado está pidiendo dos años o la libertad, eso no es justicia», expresó afligida y agregó: «Va a seguir suelto hasta la condena, cuando no tiene que estarlo».
Para cerrar, Karen solicitó a la jueza María Alejandra Vila «que no lo dejen suelto porque lo va a volver a hacer». «Es la única que puede decir que seis años son pocos para el abusador de una bebé», había dicho antes de la condena.