– Corresponsal Internacional
El camino está despejado para el nuevo paquete de sanciones a Rusia: ese fue el mensaje que salió de la reciente cumbre de la UE en Bruselas. Sólo un día después, hay otro bloqueo, de nuevo del país que ya impidió una decisión en las semanas anteriores.
Hungría exige nuevos cambios en el nuevo paquete de sanciones de la UE contra Rusia, bloqueando de nuevo su entrada en vigor. En concreto, el país exige que se renuncie a las medidas punitivas previstas contra el líder de la Iglesia Ortodoxa Rusa, el Patriarca Cirilo I, según confirmaron a dpa varios diplomáticos el miércoles por la noche. Anteriormente, el portal online hvg.hu había informado sobre el bloqueo, citando información de prensa independiente.
En realidad, el plan de la UE era poner en marcha finalmente el proceso de toma de decisiones para el sexto paquete de sanciones este miércoles. El martes por la noche, tras semanas de disputas, se alcanzó un acuerdo en una cumbre sobre el embargo de petróleo previsto, que es una parte importante del paquete de sanciones. Hungría consiguió que los envíos de petróleo por oleoducto quedaran exentos de la prohibición de importación por el momento.
Prohibición de entrada para el patriarca
El miércoles, los embajadores de los 27 Estados miembros se reunieron para ultimar los detalles legales de las sanciones y otros pormenores. Según los diplomáticos implicados, Hungría se negó a incluir al patriarca en la lista de sanciones de la UE. En concreto, las sanciones contra Cyril significarán que el clérigo ya no podría entrar en la UE. Además, habría que congelar los activos que pudiera tener en la UE.
Patriarca Kyrill
Cirilo mantiene un estrecho contacto con el presidente ruso Vladimir Putin y hasta ahora se ha mostrado muy leal al Kremlin. En sus sermones, el hombre de 75 años respaldó repetidamente el curso de la guerra y recientemente incluso afirmó que Rusia nunca había atacado a otro país. El jefe de la Iglesia Católica, el Papa Francisco, canceló una reunión prevista con Cirilo.
Críticas de Orban ya hace semanas
Según los diplomáticos, las sanciones previstas contra Cyril no se discutieron en la cumbre de la UE del lunes y martes. Sin embargo, Orban ya había expresado su rechazo en una entrevista radiofónica a principios de mayo. “Hungría no dará su consentimiento para tratar a los líderes de la Iglesia de esa manera”, dijo entonces. “Por razones de principio, esta es una cuestión aún más importante que el embargo de petróleo”.
Tristan Azbej, secretario de Estado húngaro responsable de los “cristianos perseguidos en el mundo”, dijo poco después sobre la posición húngara: “La Iglesia Ortodoxa Rusa tiene 160 millones de creyentes y 40.000 sacerdotes en todo el mundo. La idea “completamente descabellada” de la Comisión de la UE incluso prohibiría al líder de la Iglesia Ortodoxa entrar en el territorio de la UE, es decir, aislaría a los fieles que viven allí de su líder religioso. Esta idea es perjudicial, no conduce a la reconciliación”.
En la propia Hungría apenas hay seguidores de la Iglesia Ortodoxa Rusa, según datos de la UE. La gran mayoría de los creyentes son católicos, según las cifras oficiales.
¿Intento de acuerdo el jueves?
El miércoles por la tarde aún no estaba claro cómo se podría resolver el conflicto. Según los diplomáticos, podría haber más conversaciones y un nuevo intento de unificación el jueves al margen de una reunión ministerial de la UE en Luxemburgo.
Hungría ya ha negociado una exención para las importaciones de petróleo ruso que llegan a la UE por oleoducto
Además del embargo de petróleo y las sanciones contra el Patriarca, el sexto gran paquete de sanciones de la UE contra Rusia contendrá otras muchas medidas. Por ejemplo, está previsto excluir al mayor banco de Rusia, Sberbank, de la red de comunicaciones financieras Swift. Además, se van a prohibir varios canales de noticias rusos en la UE.
Las importaciones rusas de petróleo se reducirán un 90 por ciento
El boicot a las entregas de petróleo de Rusia, de especial relevancia económica, prevé que no se permita la entrada de más petróleo en la UE por vía marítima durante el próximo año. Sólo Hungría, Eslovaquia y la República Checa podrán importar petróleo ruso a través del oleoducto “Druzhba” hasta nuevo aviso, debido a su gran dependencia.
Según la Presidenta de la Comisión, Ursula von der Leyen, la UE comprará alrededor de un 90% menos de petróleo a Rusia a finales de año, a pesar de la exención de los suministros por oleoducto. Según estimaciones del grupo de reflexión de la UE Bruegel, hasta hace poco los Estados de la UE seguían gastando unos 450 millones de euros al día en petróleo procedente de Rusia y 400 millones de euros en gas.