Karin Silvina Hiebaum – International Press

Pocos eventos en la vida son tan dolorosos como la muerte de un esposo, esposa o pareja.

Una mujer abraza a su madre para consolarla
Es posible que no sepa cómo sobrevivirá a esta pérdida sobrecogedora. Incluso podría cuestionarse si tiene la energía o el deseo de intentar superarlo. Estas 8 sugerencias prácticas pueden ayudarle a avanzar hacia la recuperación.

Permítase sentirse triste: su compañero ha fallecido. Si se siente confundido, debe saber que es normal: ha perdido una parte de su vida. Ahora debe enfrentar la difícil pero importante necesidad de atravesar el período de duelo. El luto es la expresión manifiesta de sus pensamientos y sentimientos. Es una parte esencial del proceso de sanación.
Procese el duelo como sea que necesite hacerlo: su experiencia se verá influenciada por las circunstancias relacionadas con la muerte, otras pérdidas que haya vivido, su sistema de apoyo emocional, su cultura y su fe. No compare su experiencia con la de otras personas. Viva un día a la vez y permítase atravesar el duelo a su propio ritmo.
Hable acerca de sus pensamientos y sentimientos: el proceso de sanación comienza cuando logra compartir su dolor con otros. Permítase hablar acerca de la muerte, sus sentimientos de pérdida y soledad, y las cosas especiales que extraña de su compañero.
Permítase experimentar distintas emociones: tener que enfrentar un fallecimiento afectará su cabeza, corazón y espíritu. Confusión, desorientación, miedo, culpa, alivio y enojo son solo algunas de las emociones que podría sentir. No se sienta abrumado si de repente experimenta períodos de dolor o tristeza que parecen haber surgido de la nada. Permitirse aprender de estos sentimientos y emociones le ayudará a sanar.
Busque un sistema de apoyo: acérquese a quienes se preocupan por usted y desean acompañarlo durante el proceso de duelo. Busque un grupo de apoyo al que le gustaría asistir. Evite a las personas críticas o deseosas de dar consejos. Tiene derecho a expresar su dolor, pero también tiene derecho a no compartirlo.
El duelo es un proceso difícil: el duelo es un proceso físico y emocional. Siente y vive a través de sus emociones, cuerpo físico y espíritu. Respete lo que su cuerpo intenta decirle. Trátese a usted mismo como lo haría con un amigo.
Haga las cosas cuando sea el momento correcto: hay cosas que deberá hacer de inmediato pero, en general, no se obligue a hacer nada para lo cual aún no esté listo. Puede tomar algunas decisiones ahora y posponer otras. No permita que otras personas tomen decisiones por usted.
Celebre sus recuerdos: los momentos en los que más extrañará a su compañero son los días especiales que ambos compartieron. Dado que el dolor y la pérdida pueden ser más intensos en esos momentos, quizá desee que alguien lo acompañe. Si lo desea, comparta sus recuerdos con amigos pero continúe honrando la vida que usted y su cónyuge compartieron al conservar un lugar especial en su corazón para celebrar y atesorar sus recuerdos de unión.