Es el hombre más rico del mundo y solo eso le bastaría para ser un personaje público, pero lo es también por manifestar sin filtros sus controvertidas opiniones. Tiene un cerebro en continua ebullición que funciona de un modo diferente.

Es el hombre más rico del mundo y solo eso le bastaría para ser un personaje público, pero lo es también por manifestar sin filtros sus controvertidas opiniones. Tiene un cerebro en continua ebullición que funciona de un modo diferente.

Elon Musk ha hablado en numerosas ocasiones de sus problemas de salud mental. Además, el empresario reveló hace dos años que tiene síndrome de Asperger y, desde entonces, sus confesiones han sido cada vez más personales. 

El multimillonario supo hacer del Asperger un aliado para su éxito, en lugar de una limitación. Él explica que “sé que a veces digo o posteo cosas extrañas en internet, pero así es simplemente como funciona mi cerebro. A quien se haya sentido ofendido, solo quiero decirle que reinventé los automóviles eléctricos y estoy enviando gente a Marte en un cohete, ¿pensaban que iba a ser un tipo normal y relajado?”.

FUERZAS PELIGROSAS

Recientemente, Musk desvelaba en una entrevista que pensó en suicidarse a los 12 años. “¿Todo es inútil?, ¿por qué existir?”, eran algunos de sus pensamientos recurrentes. Esa crisis existencial, cuenta, se resolvió al comprender que el significado de la vida no se reduce a una respuesta simple. 

Sin embargo, el fundador de Tesla y SpaceX sigue, a sus 52 años, dominado por una mente que describe como una “tormenta salvaje“, por la gran cantidad de pensamientos que se formula cada día, matizando que “esa furia de fuerzas están, en su mayor parte, aprovechadas para fines productivos, pero de vez en cuando… algo sale mal”.

¿QUÉ ES EL SÍNDROME DE ASPERGER?

El síndrome de Asperger es un trastorno del desarrollo que se incluye dentro del espectro autista y que afecta a la interacción social recíproca y a la comunicación verbal y no verbal, imprimiendo una resistencia para aceptar el cambio e inflexibilidad del pensamiento, así como poseer campos de interés estrechos y absorbentes, según explica la Confederación Asperger España. Hay distintos rangos en la severidad de sus síntomas, por eso las personas que los manifiestan más leves a menudo no son diagnosticadas y simplemente se las considera raras o excéntricas. 

En términos generales, los afectados por esta condición encuentran dificultad para hacer amigos debido a su falta de habilidades sociales. Utilizan el lenguaje de una manera que puede resultar rara y le aplican un significado literal a lo que leen y oyen. 

Estas personas se sienten más tranquilas y seguras siguiendo rutinas fijas y tienen dificultades con el pensamiento imaginativo y creativo. Aman la alabanza, ganar y ser los primeros, pero les resulta difícil sobrellevar el fracaso, la imperfección o la crítica. 

Las personas con este síndrome son, generalmente, extremadamente buenas en todo lo que implica habilidades de memoria (hechos, figuras, fechas, épocas, etc.), y muchos sobresalen en matemáticas y ciencia.