El contacto piel a piel entre una mamá y su bebé genera muchos beneficios para el buen desarrollo, por lo que se recomiendan entre 4 a 12 abrazos diarios. Además, los abrazos incrementan la producción de serotonina y les permiten a los bebés generar mayor cantidad de glóbulos blancos.
El Día Internacional del Abrazo se celebra cada 21 de enero.
Para un desarrollo normal, las niñas y los niños requieren diferentes estímulos sensoriales. El tacto de la piel y el contacto físico, como el abrazo, son de los estímulos más importantes para el desarrollo de un cerebro y un cuerpo sano. Estudios científicos del Canadian Association of Paediatric Health Centers comprueban que el contacto piel-a-piel entre una mamá y su bebé tiene el potencial de generar muchos beneficios por lo que recomiendan entre 4 a 12 abrazos diarios.

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Estos gestos de afecto son fundamentales para el crecimiento de los bebés, y en el marco de la celebración del Día Internacional del Abrazo, Huggies en alianza con UNICEF presentan algunos de los beneficios que tienen los abrazos en su correcto desarrollo:

Aumenta la seguridad y eleva la confianza
Según la revista científica Developmental Medicine & Child Neurology, luego de nueve meses en el vientre, el bebé dejará de sentir la seguridad que experimentaba. Los abrazos, incrementan la producción de serotonina, sustancia que está presente en las neuronas y aumenta la autoestima en los pequeños. Los abrazos desencadenan la liberación de oxitocina, conocida como la hormona del amor. Esta hormona tiene muchos efectos sobre el cuerpo humano, entre ellos la estimulación del crecimiento. Cuando el nivel de oxitocina aumenta, también aumenta el nivel de otras hormonas relacionadas con el crecimiento (factor del crecimiento insulínico IGF-1, factor de crecimiento nervioso NGF).

Incrementa la salud de los bebés prematuros
En América Latina y el Caribe, 7 de cada 1.000 bebés nacidos no logran llegar a su primer mes de vida, de acuerdo con cifras presentadas por UNICEF. Por lo cual, en el 2022, la Organización Mundial de la Salud (OMS) publicó nuevas directrices para mejorar las posibilidades de supervivencia y los resultados de salud de los bebés nacidos prematuramente con métodos a través del contacto físico.
El Método Mamá Canguro (MMC), es uno de estos, que, de acuerdo con UNICEF, consiste en asegurar el contacto piel con piel entre el bebé y su madre, de manera continua por lo menos 20 horas, o de forma intermitente; es decir, la mayor cantidad de horas posibles. Esta técnica ayuda al bebé a regular su respiración y el calor de su cuerpo, y además favorece la lactancia materna y fomenta el vínculo con su madre.

Fortalece el sistema inmunológico de los bebés
Mientras más abrazos reciban las niñas y los niños, mayores defensas podrán generar. De acuerdo con la organización Pediatric Childcare, gracias a los abrazos, los bebés generarán mayor cantidad de glóbulos blancos, ya que el sistema inmunitario se activa cada vez que hay contacto físico. Además, ayuda a reducir los niveles plasmáticos de las hormonas tiroideas y hace que las heridas sanen más rápidamente. Igualmente, reducen el nivel de cortisol en sangre, lo que nivela y reduce los niveles de estrés.

Ayudan a regular sus emociones
El sistema nervioso es la parte que controla la calma y la excitación, sentimientos que funcionan por separado para regular la emoción. Durante un berrinche infantil, la parte responsable de la excitación está trabajando al 100% mientras que la responsable de la calma está desactivada. De acuerdo con la Revista Científica Biological Psycology, los abrazos ayudan a relajar el sistema nervioso trabajando sobre la parte que controla la calma y así reducir la ansiedad y el nivel de estrés gracias a la liberación de oxitocina y de dopamina.

El poder de los abrazos es importante.
Para más consejos, recomendaciones e información acerca del desarrollo y cuidado de los bebés, niñas y niños visite: Más Abrazos: Te acompañamos durante tu embarazo y maternidad (masabrazos.com.ar). Además, UNICEF pone a disposición de las familias información práctica, recomendaciones y consejos de expertos a través del Portal de la Crianza https://www.unicef.org/lac/crianza.

Fuente: Kimberly-Clarck