El panqueque mejor conectado con el Foro de Sao Paulo y Davos
Muy importante saber que para los años venideros en Argentina, todos notamos la cada vez más arruinada imagen de Alberto Fernández, No solamente en tema de aceptación del público, sino física y mentalmente la presión de los inversores empresarios organizaciones internacionales y la gente del partido, el cual tomó prestado, están haciendo estragos en su persona.
Un panqueque que ha realizado mayores viajes a los Estados Unidos, acompañando a Macri, a Fernández y siempre presentando a las personas claves de la elite estadounidense.
Como se sabe, suerte para la élite todos los planes por los que pusieron Alberto Fernández en el poder, de todas formas, van a cumplirse. Estando él o no en el poder, ya que ya tienen elegido a su reemplazo y este será Sergio Massa, quien lleva años rindiendo examen ante las organizaciones más poderosas del mundo. Las cuales lo han moldeado para convertirse algún día, en el presidente más globalista de toda la historia argentina.
Próximamente, el “super ministro” tomará su examen final dirigiéndose a Estados Unidos y reuniéndose con los representantes de las organizaciones más poderosas, incluyendo a Susan Seagal, la secretaria de Rockefeller en Latinoamérica, siendo posiblemente la mujer más poderosa de nuestra región. Así que, qué pasará si Alberto va a renunciar, Massa va a tomar el poder, va a haber elecciones anticipadas, o simplemente va a haber un traspaso de poder a la antigua, como cuando el rey ya no estaba más y asumía su hijo,
Se podría analizar, para saber cuál es el camino que tomará ahora Massa para convertirse en presidente
Sergio Massa salió al estrellato, luego de convertirse en jefe de gabinete de Kirchner, después de la renuncia. Tanto Massa como Macri, ambos siempre fueron muy cercanos siendo que eran los nexos entre el Gobierno argentino y la embajada estadounidense. Massa se dedicaba a contar todo el chimento de la pareja presidencial al embajador hasta llamando a su propio jefe Néstor Kirchner un psicópata siniestro. Luego pasaría a trabajar con la oposición o sea Mauricio Macri, para terminar, traicionándolos también y luego llamarlo un soberbio mezquino e insensible. La carrera de Massa, en la última década se basó en ser una aspiradora de votos bajo pedido de Alberto Fernández.
Su postulación en 2015 bajo pedido de Alberto sirvió para que el candidato Kirchnerista, Daniel Scioli perdiera votos contra Macri, o sea los votos de los frustrados con la administración de Cristina. Similarmente Alberto haría campaña con Randazzo en 2017. para quitarle los votos que Cristina necesitaba para ganar en las legislativas. permitiendo que cambiemos saliera victorioso. Por eso, la decisión de que Massa se convierta en el nuevo presidente.
Juan Sebastián González, director para el hemisferio occidental del Consejo de Seguridad nacional de la Casa Blanca y mano derecha de Beijing en Latinoamérica. vino a Buenos Aires recientemente a reunirse 50 minutos con Alberto Fernández, y con Massa, con quien se reunió dos horas en privado, eligiéndolo como el afortunado que reestructurará la deuda del país, Massa, por su parte, le habló sobre el cambio climático y declaró que en Argentina “somos deudores financieros pero acreedores ambientales “ remarcando la importancia que le da el gobierno a la problemática global y trayendo a colación también las economías tecnológicas y el mercado alimentario. Lo que, con lo que el gobierno Fernández hizo trato con la Fundación Bill y Melinda Gates, entonces bajo la visión de Massa: Argentina está completamente condenada a no industrializarse, porque si pones fábricas estarías contaminando. Este es el plan detrás de esta espantosa agenda verde, donde el desarrollo del futuro será verde.
Se sabe que esta cercanía del Gobierno estadounidense con Massa va más allá de la Embajada, siendo miembro del Instituto Nacional demócrata. El principal lobby de la izquierda estadounidense, o sea los Clinton y amigos del pedófilo jefe de campaña de los Clinton. Fue el que pidió explícitamente que Alberto Fernández dirigirá el Partido Justicialista, pero también tiene buenas relaciones con el abogado de Trump y exalcalde de Nueva York Rudolph Giuliani, quién lo invitó a la Asunción del expresidente.
La agenda de Mass, antes de que le den el ok para ser presidente iría a Washington y Nueva York para reunirse con funcionarios de la Casa Blanca y el Departamento de Estado: legisladores del Congreso, encuentros con inversores y un cierre con Bill Clinton de una nación. La gira le brindará al gobierno una oportunidad de reforzar la relación bilateral, o sea entregar el topor y a Massa, la posibilidad de aceptar sus vínculos – que gracioso hayan dicho justo-, afeitar con el establishment político y económico de Estados Unidos.
Massa será la primera figura del tridente político del frente de todos que pisará Washington en Nueva York desde la Asunción de Fernández, un viaje donde el implantaran cuál será el rumbo que deberá salir a Argentina.
Primero se reunirá con el antes mencionado Juan González, para después ir con Gregory Mix, presidente del comité de Asuntos Exteriores de la Cámara baja, con quién más ha establecido un vínculo de trabajo, y quien ya había dado órdenes de pago de deuda.
Massa tendrá posteriormente una reunión en el Departamento de Estado con Yuli Chung, la subsecretaria interina para asuntos del hemisferio occidental la cual, es la diplomática de mayor rango de EEUU para Latinoamérica. Posteriormente, ir a almorzar al famoso capitolio con congresistas norteamericanos que estará encabezado por la congresista Linda Sánchez, demócrata de California.
Se reunirá con dos directivos del comité judío americano, la directora del Instituto de asuntos latinos, el jefe de asuntos políticos: son para discutir -quién sabe-, asuntos patagónicos en el Congreso. Más también se reunirá con dos influyentes legisladores de Florida: el senador Bob Menéndez presidente del comité de Relaciones Exteriores del Senado, y una de las figuras de mayor trayectoria en la Cámara alta junto al congresista Mario Díaz Balart, que lo recibirá junto a otros integrantes del caucus de congresistas latinos y judíos, de la Cámara baja, incluidos a David Wells, quien fue presidente del Partido Demócrata, y la persona de confianza de Hillary Clinton.
Massa, también expondrá en la sede del diálogo interamericano, donde lo recibirá el presidente Michael Shifter, y el título es “Argentina panorama político y económico: perspectivas para las relaciones entre Estados Unidos y la Argentina”. No habrá reunión con nadie del FMI, pero sí con la secretaria de Rockefeller, Susan Seagal, presidente de la organización American society Council of the américas, una organización que básicamente toma examen a los políticos de Latinoamérica y España, para ver que estén alineados con la agenda global.
También estarán inversores y ejecutivos de bancos de inversión de Wall Street , que siguen de cerca la economía Argentina.
Analizan que parte de la torta les toca. Para ellos, tampoco era necesario que más se reuniera con el FMI, ya que China le ha dado el ok para todo el tema de la reestructuración de la deuda.
Si Massa también está con los chinos, y por último se verá con el presidente del Congreso judío latinoamericano Jack Rosen, seguramente también para hablar de asuntos patagónicos, pero no quisiéramos, poner especular. Y al final, también una última reunión con Bill Clinton.
Entonces Massa se dirige a Estados Unidos para hacer el garante de que territorios del país van a entregar cuando sea coronado presidente, el cual es su ambición desde que entró a la política y se termina de confirmar lo que dijo Luis Delia hace mucho tiempo, que Alberto Fernández lo que quería era una alianza global con la familia Clinton, y que Argentina solamente sirviera de jardincito para el poder norteamericano .
Esta misión de Alberto terminará siendo heredada por su hijo pródigo Sergio Massa, y los que ya están perfectamente de acuerdo con todo esto y la oposición tenerlo por seguro ellos lo van a acompañar en este proyecto porque todos todos están conectados a la embajada al Partido Demócrata y a Susan Seagal. La víbora bicéfala juega las dos puntas de la cabeza, por lo que el próximamente, más tarde capaz más temprano, veremos la fórmula presidencial: Massa/Máximo. Massa, será el representante de las corporaciones nacionales frente al capital internacional, y Máximo será quien le llevará los votos y también apaciguar a La Cámpora para que nunca protesten ante todos estos nuevos proyectos y la venta completa del territorio, para la transformación de Argentina no en Venezuela sino en Zimbabue.
La forma de detener esto, mostrando tu descontento, no vayas a votar a estas personas, no apoyes ninguno de sus proyectos políticos, no les des tu apoyo porque lo que acá está en juegos es tu libertad.