La importancia de promover el deporte para el desarrollo físico. Algunas recomendaciones sobre cómo practicarlo de una manera saludable.
La UNESCO declaró el día 6 de abril como Día Internacional del Deporte, teniendo como objetivo potenciar el mismo como herramienta para enseñar valores, mejorar la salud y promover la sana competencia. Además, eligió esta fecha ya que se conmemora la inauguración de los primeros juegos olímpicos de la era moderna en Atenas en 1896.
¿Por qué es importante hacer deporte?
El deporte no solo es importante para el desarrollo físico y para la salud, sino también para la adquisición de valores, mejorar la relación entre personas, trabajando en equipo, respetando a los demás y adquiriendo disciplina.
La ciencia ha comprobado a lo largo del tiempo que realizar actividad física con regularidad ayuda a mantener una vida saludable tanto física como mental, siendo considerada como un pilar fundamental en la promoción de salud, dado que previene enfermedades y mejora la salud cardiovascular, metabólica, osteoarticular, cognitivo y emocional, sin dejar de mencionar que en los niños mejora el rendimiento académico.
“Realizar ejercicio al aire libre genera una mayor sensación de vitalidad y optimismo, y contribuye a disminuir los niveles de estrés y tensión, además de los beneficios que brinda el sol en la producción de vitamina D; a perder peso, a regular la tensión arterial, aumentar la capacidad pulmonar, brindar flexibilidad y firmeza a los músculos, a equilibrar los niveles de azúcar en sangre, incrementando nuestra respuesta inmunológica”, explica la Dra. Valeria El Haj.
Recomendación
Según la Organización Mundial de la Salud se recomiendan 30 minutos de actividad física moderada en el día, sumar 10.000 pasos cada día, fraccionar y bajar al máximo el tiempo sentado.
Se brindan algunas sugerencias para incorporar el ejercicio de manera diaria:
– Preferir el transporte activo dentro de lo posible (caminar, pedalear, patinar) antes que los vehículos con motor (colectivos, auto, moto).
– Elegir las escaleras siempre, para subir y bajar, en lugar del ascensor.
– Estimular los juegos que impliquen movimiento al aire libre, fomentarlos con nuestros niños.
– Evitar pasar largas horas sentado, disminuir al máximo el tiempo pantalla (TV, computadora, videojuegos).
– Buscar momentos para hacer un ejercicio físico que nos guste, incrementando la intensidad y complejidad de forma progresiva.
– Caminar, ¡toda caminata suma!
– Predicar con el ejemplo ante nuestros hijos.