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Caleta Olivia
Con una ceremonia religiosa a las ocho de la mañana, se iniciaron ayer en ésta ciudad las actividades previstas en el día de San Cayetano, patrono del Pan y Trabajo.
Las celebraciones continuaron a las 10 y a las 14 horas y a las cuatro y media de la tarde se inició la procesión desde Juan José Paso y Mosconi, hasta la iglesia ubicada en el barrio San Cayetano.
Los fieles, arribaron a las 18 horas donde se llevó a cabo la misa central y donde la comunidad colaboró con alimentos no perecederos.
La jornada cerró a las 21 horas con una misa animada por un grupo de jóvenes.
La vida de San Cayetano se caracterizó por ayudar al prójimo, por su entrega a las personas más necesitadas y, sobre todo, se destacó por su manera austera de vivir, entregando todo lo que tenía.
El origen de esta celebración se remonta al 7 de agosto de 1547, el día de la muerte del Santo.
El presbítero italiano nació en el seno de una familia acomodada, pero desde joven supo que su objetivo era ayudar y servir a los demás. En efecto, todo los ajeno a esto, era algo superfluo y no necesario para poder vivir en plenitud.
San Cayetano fue hijo de los condes de Thiene, su padre, el Conde Gaspar de Thiene y su madre María di Porto, y estudió derecho en la Universidad de Padua. Recién terminada la carrera fue nombrado protonotario apostólico en la corte del papa Julio II, en Roma y, a partir de ese momento, comenzó una vida de reflexión y filosofía.
Fue el creador de la asociación “Del amor divino”, cuyo objetivo era enseñar a los socios a llevar una vida de ayuda a los demás, sobre todo hacia las personas enfermas y a todas aquellas que no se valían por sí mismas. Luego, en Venecia, creó un hospital para los enfermos terminales que sin tener ningún tipo de esperanza de vida, los cuidaba hasta el final de sus días.
A lo largo del tiempo se desprendió de todos sus bienes entregándoselo a los más pobres y no quiso ningún tipo de reconocimiento ni de honores, cuando miles y miles de personas lo estaban pasaban muy mal. San Cayetano fue un convencido de que la Iglesia debía servir a los más pobres y que el clero debía tenía como objetivo renovar el espíritu y la labor misionera de los sacerdotes.