En el gimnasio 17 de Octubre, los adultos mayores que participan del programa “Actividad Física, Salud y Tiempo Libre” que ofrece la Dirección General de Deportes de la Municipalidad de Río Gallegos en los cinco gimnasios municipales, realizaron la última evaluación anual de progreso y rendimiento.
Se trata de una serie de test, coordinados por los profesores, líderes deportivos y personal de salud, que pretenden registrar la capacidad aeróbica, fuerza, flexibilidad, equilibrio y coordinación de cada una de las personas que participan de esta actividad.
“Este tipo de análisis nos permite conocer la situación de los alumnos, y que ellos vean sus progresos; esto genera una importante motivación para seguir participando de estos espacios” dijo la profesora Florencia Minolfi, una de las impulsoras de este programa que ya lleva 15 años en funcionamiento, con un importante crecimiento.
“Es un nueva evaluación que pretende llevar un registro de trabajo realizado durante el año, a fin de que los integrantes del grupo tengan una noción de su progreso, de acuerdo a su continuidad en las clases y del trabajo que hacen”, dijo.
Destacó la importante convocatoria que generan estas actividades que se ofrecen en todos los gimnasios municipales. “Es un trabajo que se ha afianzado con los años y la gente lo toma muy bien y lo considera necesario. Nuestra idea es siempre seguir en crecimiento, captar la mayor cantidad de participantes, abrirlo a la comunidad proponiendo cosas nuevas”, dijo.
Por su parte, su colega y compañera desde el inicio de la actividad, la profesora Juliana Antonucci agradeció la colaboración desinteresada “del señor Aldo Escobar, quien es paramédico de Udem, y de Silvia Baragiomi, enfermera del hospital, quienes se ofrecen y nos ayudan”.
La docente contó que “esta actividad es una más de las que se realizan habitualmente a fin de año”, contó que hace unos días una delegación de adultos mayores arribaron del viaje de cierre a El Chaltén: “la pasamos muy bien, agradecemos al Intendente Pablo Grasso que nos ayudó con el transporte y la comida. Hoy son 200 las personas que participan de este proyecto; logramos que funcione en los cinco gimnasios y cada vez con mayor convocatoria. Para el próximo año queremos sumar más agentes que se animen a trabajar con el adulto mayor porque cada vez la demanda crece”, añadió.
Para finalizar, viendo el progreso y entusiasmo de los alumnos resaltó que “podemos hacer un balance muy positivo por el contexto que nos atravesó”. Expresó su satisfacción de poder trabajar con este rango de etario que ha sido muy afectado por la pandemia. “Fueron tiempos muy difíciles para muchos. Muchos ya no están y tenemos que trabajar con el grupo para abordar esas situaciones. Lo importante es seguir motivándolos, acompañarlos y contenerlos para que sigan adelante”, dijo.
Participantes destacan la calidez del grupo humano
Juan José Concetti y Gonzalo Miranda son dos amigos que se incorporaron este año al proyecto y agradecieron al Municipio que potencie este tipo de propuestas destinadas a los adultos mayores.
“Soy una persona que hace 37 años no hacía actividad física; fui un fumador empedernido y me costó muchísimo empezar”, dijo Juan José. “Empecé junto a mi compañero a caminar y después nos enteramos que existía esta oferta en el Municipio y nos metimos. Hemos progresado bastante, me siento mucho mejor tanto física como mentalmente, porque el grupo humano es espectacular. Lo recomendaría a todos aquellos que están en la casa y que pueden experimentarlo”.
“La pandemia nos aisló; yo me lo tomé bien en serio, no salí durante un año y medio de casa y ahora agradezco poder realizar esta actividad que me permite sentirme mejor y recuperar la vida social”, dijo.
Por su parte, Gonzalo contó que “empecé por recomendación médica. Fue un proceso que inició con caminatas y dietas, entendiendo que con la edad que tenemos la actividad física es imprescindible. Por ello, quiero agradecer a la gestión municipal que sostiene este programa. Yo soy del gimnasio Rocha, por lo que quiero agradecerle el trabajo que realiza todo el equipo de trabajo y al grupo humano que participa. Son todos vecinos a los barrios cercanos a la laguna que compartimos una rutina semanal, más actividades de tiempo libre que nos hacen muy bien. Socializar con otra gente nos permite salir adelante. Una actividad que recomendaría a todos mis pares”, concluyó.