El Juzgado Nacional de Primera Instancia en lo Comercial N°28, ordenó el remate de la Estancia Río Bote, uno del medio centenar de campos que el seudo-empresario Lázaro Báez compró de manera sospechosa entre 2005 y 2015.
Esta propiedad está a unos 40 Km. al Este de El Calafate, el “lugar en el mundo” del “Clan Kirchner”.
La orden para el remate fue dada por María José Gigy Traynor, titular de ese juzgado, quien decretó la quiebra de Austral Construcciones SA empresa creada por Lázaro coincidentemente con la llegada de Néstor Kirchner al poder en el gobierno nacional.
Con una base de casi $40 millones, las 8.200 hectáreas de Río Bote se subastarán en el marco de la causa que tramita quiebra de Austral Construcciones.
Vale mencionar que a la instancia de remate se llega tras el informe ordenado por la Jueza, quien el año pasado pidió un estudio pormenorizado sobre esa estancia y otras tres más que pertenecían a Báez: la “Cruz Aike” (que es lindante a “Río Bote”), El Campamento y La Porteña.
En el Boletín Oficial, se comunica por cinco días en los autos “AUSTRAL CONSTRUCCIONES S.A. S/ QUIEBRA S/ INCIDENTE DE VENTA ESTANCIA RIO BOTE, PROVINCIA DE SANTA CRUZ” (Expte N°: 22216/2017/27), el martillero Alberto Fraguas CUIT 20-16674879-9 Tel.(011) 4034-5591 rematará el jueves 16 de junio 2022 a las 12 hs. en punto en la Dirección de Subastas Judiciales, calle Jean Jaures 545 CABA, los derechos y acciones que detenta la fallida sobre la Estancia Río Bote. La propiedad está identificada catastralmente como: Matrícula N° 2904 Departamento III, Lote 1, con designación Catastral N° 09300001713, de superficie 8192 Has, 37 a 14 ca., que linda al oeste con la “Estancia Franka”, al este con la “Estancia Cruz Aike”, al sur con la “Estancia La Martina” y hacia el norte con el Río Santa Cruz.
Un tablero real
En el tablero del juego Monopoly hay un solo objetivo, ser multimillonario y obtener “todo”. En ese juego de mesa, las fichas y el dinero ficticio hacen la diferencia, pero en la realidad lo que está en juego es “el poder” que domina todo el tablero, que en Santa Cruz, el tablero parece ser su territorio.
En el “juego” el objetivo es “obtener un monopolio de calles e inmuebles. Los jugadores mueven sus fichas por turnos en sentido horario alrededor de un tablero, basándose en la puntuación de los dados, y caen en propiedades que pueden comprar de la banca, o dejar que la banca las subaste en caso de no ser compradas.
En la mesa del Monopoly, están en juego billetes, fichas, hoteles y tarjetas. Como el nombre sugiere, el objetivo del juego es formar un monopolio de oferta, poseyendo todas las propiedades inmuebles que aparecen en el juego”. Cualquier parecido con la realidad de Santa Cruz y la familia Kirchner es pura coincidencia.
Todo calculado
Desde que se inició el proceso administrativo para la construcción de las represas Cóndor Cliff y La Barrancosa (luego bautizadas Kirchner – Cepernic) se contempló la expropiación de 64 estancias que serían afectadas al proyecto.
Báez era – y es aun – dueño de más de diez de las estancias afectadas, pero nunca se presentó o envió representantes a las reuniones en las que los superficiarios (los propietarios de las estancias afectadas) discutieron con el gobierno los mecanismos y las formas en las que se podría concretar el proyecto hídrico.
Claramente a Lázaro le tenía sin cuidado el resultado de esas audiencias; ya que él estaba detrás de un plan mucho más lucrativo: el negocio inmobiliario que haría con su socio Néstor Kirchner con el territorio de Santa Cruz.
Cabe mencionar que “Río Bote” tiene una superficie total de 8.192 hectáreas, de las cuales más de 33 mil están afectadas al proceso de expropiación por razones de utilidad pública declarada por la normativa citada con motivo de la construcción de las represas hidroeléctricas sobre el río Santa Cruz.
De acuerdo a la información del caso que investiga la fortuna del seudo-empresario K, Lázaro Báez adquirió 300.000 hectáreas en Santa Cruz. Siete de esas estancias se encuentran en la zona donde se construirán las represas, pero afecta lateralmente los campos según se desprende del plano de emplazamiento de las futuras represas. En el informe oficial de 2015, queda en claro que los millones que recibiría Lázaro (y sus socios K) por la expropiación tendrían un monto superior al de la real pérdida por la afectación. Es decir un Plan Maestro.
Vale mencionar que la superficie no expropiada se trata de “un campo apto solo para invernada y con muy poco pastizal”, como el resto que será rematado. Un negocio “redondo”.
El campo se encuentra a los lados de la Ruta Nacional 40, siendo al norte de la ruta un campo de valle con mallines hasta llegar al lago Argentino y al sur un campo de meseta.
Comprados “cash”
Años atrás, cuando el “Kirchnerismo” tenía pode absoluto a nivel Nacional –y obviamente Provincial – Lázaro donó por escritura pública, y por adelantado, lo que pudiera resultar de la expropiación de sus estancias, que de acuerdo a los mapas tentativos no serán las más afectadas.
Las estancias fueron adquiridas entre los años 2006 y 2010, a través de las empresas Austral Agro y Austral Construcciones. La mayoría de las compras las concretó su ex contador Fernando Butti, quien convocaba a su oficina a los dueños y les hacía el ofrecimiento de la compra, al contado y en efectivo.
En 2013, Báez participó de la licitación pese a estar en el centro de las denuncias por presunto lavado de dinero. Fue parte del consorcio integrado por Sinohydro, Iecsa, Chediak y Esuco. No escatimó esfuerzos para ser parte del negocio. Para conformar el consorcio con Sinohydro viajó a China Julio Enrique Mendoza, uno de sus hombres de confianza. Finalmente quedó fuera y la licitación fue ganada por otra empresa afín al Gobierno: la cordobesa Electroingeniería.
En el momento en que comenzaron las sospechas del negocio, el diario La Nación señalaba: “Hoy Báez está pronto para dar servicios. Aquí aventuran que no se mantendría lejos del negocio de canteras. Las mismas podrían ser tomadas de los 200 metros que ahora se expropian a todas las estancias incluidas las de Báez. Él es el único de los superficiarios, con una infraestructura para realizar la explotación de las canteras”. Nuevamente, otro gran negocio.
Millones en juego
Cuando se iniciaron los trámites para las expropiaciones, el Tribunal de Tasación informó que la estancia Río Bote tenía un valor de $16 millones. En la actualidad el valor base fijado para el remate asciende a 38.965.870 de pesos.
Por otra parte se informó que la modalidad de remate será “Ad Corpus”, al contado y mejor postor. El valor no incluye IVA ni comisión, que es del 3%, ni el arancel de la Corte Suprema de Justicia, que equivale al 0,25%.
El remate de la Estancia “Río Bote” se realizará el 16 de junio próximo, a las 12 hs., en el Salón de Remates del Poder Judicial (Jean Jaures 545 – C.A.B.A.).
La noticia de la semana será que expropiarán un campo de Lázaro Báez. Pero no hay que olvidar que este seudo-empresario era “empleado” del fallecido Néstor Kirchner quien supo desde el principio que el tema de las represas sobre el río Santa Cruz iba a ser un “gran negocio” y por eso estuvo detrás de la maniobra de la compra de enormes extensiones de tierras en Santa Cruz, que luego duplicarían su valor y obviamente abultarían su cuenta bancaria.
Una nueva vieja estafa a los santacruceños.