El agua subterránea alcanza un mínimo histórico

En la cuenca del sur de Viena, el agua subterránea es actualmente más baja que nunca. Cada vez más ríos y arroyos se están secando, hay que revisar los pozos de las casas. El pronóstico para el futuro tampoco es prometedor.En

La escasa precipitación de los últimos años es la culpable del nivel históricamente bajo de las aguas subterráneas, explicó Günther Konheisner, subjefe de gestión del agua en Baja Austria. Debido a la baja capa de nieve, no había agua ni siquiera en primavera, cuando la nieve se derrite y se filtra en el suelo.

El agua subterránea en la cuenca del sur de Viena es más baja que nunca, los ríos y arroyos, como en Helenental (distrito de Baden), se están secando cada vez más. En los últimos días también ha llovido en el sur, pero solo unos cinco milímetros por día; eso es bueno para los bosques y los prados, pero es demasiado poco para elevar el nivel de las aguas subterráneas. Con esta cantidad de lluvia, el agua no se filtra tanto en el suelo.

Recientemente ha habido problemas con los pozos domésticos en el sur de Baja Austria, por ejemplo, en el distrito de Wiener Neustadt. Se secaron y hubo que buscarlos. El estado está hablando de casos individuales al respecto. En cualquier caso, el suministro de agua potable está asegurado.

Diez por ciento menos de agua para 2050

Según Konheisner, se recomienda a los municipios contar con un segundo pilar para el suministro de agua. Las sugerencias son, por ejemplo, construir más pozos o conectar mejor el suministro nacional de agua. En cualquier caso, las previsiones de futuro no dan esperanzas. Los expertos predicen un diez por ciento menos de formación de agua subterránea en el este de Baja Austria para 2050.

Los manantiales secos en Bad Fischau (distrito de Wiener Neustadt) fueron noticia el lunes. Como resultado, una de las dos piscinas ya no se puede llenar con agua. La poca lluvia no es un problema para otros balnearios, que extraen el agua de manantiales profundos y grandes. Ahora, un informe geológico aclarará por qué Bad Fischau sufre de falta de agua y de dónde proviene normalmente el agua.

A pesar de la oferta reducida, la piscina todavía está muy concurrida y muy pocos invitados reconocen la gravedad de la situación, criticó al alcalde Reinhard Knobloch (ÖVP): «Estoy un poco sorprendido de que el hombre esté cambiando la naturaleza de tal manera que tal se están produciendo efectos dramáticos en nuestra calidad de vida inmediata”.

rojo, noe.ORF.en