Argentina reclama la soberanía sobre las islas Malvinas por vías diplomáticas desde la guerra con el Reino Unido en 1982.
El presidente de Argentina, Javier Milei, reiteró este martes (02.04.2024) el “reclamo inclaudicable” de soberanía sobre las islas Malvinas y llamó a la población argentina a una “reconciliación” con las Fuerzas Armadas que -en 1982, durante la dictadura- declararon la guerra al Reino Unido por el control del archipiélago del Atlántico sur.
Frente al cenotafio emplazado en Buenos Aires que recuerda a 649 personas argentinas muertas en la guerra que declaró al Reino Unido el gobierno de una sangrienta dictadura (1976-1983), Milei afirmó que “nadie escucha ni respeta a un país que sólo produce pobreza y cuyos políticos desprecian a sus propias Fuerzas” Armadas.
“No existe soberanía sin prosperidad económica ni prosperidad económica sin libertad económica”, dijo el mandatario que prometió impulsar desde su Gobierno “un reclamo real y sincero (respecto a Malvinas), no meras palabras, en foros internacionales con nulo impacto en la realidad”.
Rodeado por ministros, jefes militares y veteranos, Milei propuso “un Estado restringido a sus funciones esenciales y libertad para producir, trabajar, comerciar y circular”, considerando indispensable la prosperidad económica “para poder reclamar por su soberanía y ser respetada por otras naciones”.
“La economía por sí sola no alcanza, no hay soberanía ni respeto internacional por nuestros intereses si la dirigencia política hace hasta lo imposible por ensuciar el nombre de nuestras Fuerzas Armadas”, agregó el presidente al culpar a la política de “hostigar y humillar” al Ejército. “Ese tiempo se ha acabado, ustedes son orgullo para nuestra nación, tendrán el respeto que les ha sido largamente negado”, añadió.
“No quiero que el respeto a las Fuerzas Armadas y a los héroes de Malvinas sea monopolio de un espacio político”, continuó el presidente y afirmó que, “por eso, convoco al conjunto de la sociedad” a que “inauguremos una nueva era de la reconciliación” con el Ejército, dándole a las “Fuerzas Armadas el lugar, el reconocimiento y el apoyo que se merecen”.
El presidente no hizo mención alguna a la dictadura cuyos crímenes aún ventila la justicia con más de 1.100 condenados en 317 sentencias y 62 procesos en marcha, entre ellos por abusos y torturas de militares argentinos a sus soldados durante la guerra en Malvinas, además de unas 30.000 personas desaparecidas, según organismos de derechos humanos.
Argentina reclama la soberanía sobre las islas Malvinas por vías diplomáticas desde la guerra, que duró 74 días y terminó con la rendición del país sudamericano, dejando un balance de 649 personas argentinas y 255 británicas muertas.