En la localidad argentina de Bahía Blanca (provincia de Buenos Aires) al menos 13 personas fallecieron al hundirse el techo de un pabellón deportivo a causa de la fuerte tormenta que azota la zona. El domingo, 17 de diciembre, el gobierno informó que equipos de rescate trabajan en los escombros. Rige alerta naranja en diferentes zonas de la provincia de Buenos Aires.

Foto que muestra cómo las tormentas avanzan por el centro del país afectando a la provincia de Buenos Aires, Córdoba, San Luis y Santa Fe. Se desplazan hacia el noreste.
Foto que muestra cómo las tormentas avanzan por el centro del país afectando a la provincia de Buenos Aires, Córdoba, San Luis y Santa Fe. Se desplazan hacia el noreste. © Servicio Meteorológico Nacional de Argentina

El gobierno informó de la tormenta eléctrica y las ráfagas de viento superiores a los 150 km/h en la ciudad de Bahía Blanca (unos 640 kilómetros al sur de la capital argentina) y también que rige alerta naranja en diferentes zonas de la provincia de Buenos Aires.

“Con muchísimo dolor, se confirmaron hasta el momento 13 víctimas fatales. Solicitamos a la comunidad extremar los cuidados y no circular por la vía pública”, escribió Federico Susbielles, intendente de la ciudad, en su cuenta de la red social X.

Mientras, el gobernador de la provincia de Buenos Aires, el peronista Áxel Kicillof, destacó la coordinación de “esfuerzos” entre su equipo y las autoridades de Bahía Blanca “en el marco del Comité de Emergencia” y que quedaron a disposición “los recursos para reparar las consecuencias de esta tragedia”

No es el único lugar afectado

Fuertes vientos (de hasta 100 kilómetros por hora, según medios locales) y tormentas azotan tanto a la capital de Argentina como su cordón urbano, lo que ha provocado cerramiento de calles, árboles caídos, daños en viviendas y carros, cortes en el suministro eléctrico y cancelación de vuelos.

El Aeropuerto de Buenos Aires debió ser cerrado por la tormenta, obligando a desvíos y cancelaciones de vuelos. También hubo vuelos demorados en el aeropuerto de Ezeiza, en la periferia de la capital y el principal de Argentina.

Además, el suministro eléctrico en Buenos Aires se vio afectado al igual que varias localidades que rodean a la capital.